Gloria Vargas

Vuelta al Hacho 10K Ceuta

“No tenía ninguna duda que superaría ese miedo a nadar en aguas abiertas”

Descripción Embajador

¿Quién es?

Gloria tiene 32 años y es de Ceuta. Nunca se ha considerado una gran deportista, pero siempre ha sido una persona inquieta, curiosa y en constante búsqueda de retos tanto personales como profesionales. Hace dos años se apuntó a natación con un objetivo: probar algo nuevo. Lo que no imaginaba es que, poco a poco, se daría cuenta de que no solo se le daba bien, sino que además le apasionaba. Motivada por su entrenador, se unió al club Caballa Máster para comenzar a competir.

Desde siempre había admirado la Travesía de la Vuelta al Hacho de Ceuta, una de las pruebas más emblemáticas de su ciudad. Pero la veía inalcanzable, no solo por la exigencia física, sino por un obstáculo aún mayor: su miedo al mar.

En 2018 encontró también otra gran pasión: el yoga. Tanto, que hoy es su forma de vida y la base de su trabajo como profesora y fundadora del centro Agara Yoga

Reto deportivo

Hace menos de un año, Gloria dio el paso: comenzó a nadar en aguas abiertas. Lo hizo sabiendo que enfrentaba un miedo muy real, casi paralizante, pero convencida de que no podía permitir que eso la limitara.

Durante meses, combinó los entrenamientos en piscina con salidas al mar. Kilómetro a kilómetro, fue ganando confianza, experiencia y respeto por un medio que siempre le había generado incertidumbre. Y llegó el día.

En julio de 2025, Gloria completó la Travesía de la Vuelta al Hacho: 10 kilómetros rodeando Ceuta por mar, pasando por el Foso navegable, el puerto, la bocana… bordeando el norte bañado por el Atlántico y el sur por el Mediterráneo. Una travesía tan espectacular como impredecible: corrientes, olas, medusas. Este año, tocó lidiar con todo ello.

“Desde el inicio, mantuve un ritmo constante, firme. Sabía que el kilómetro 5 sería una batalla contra corriente. En el 7, tuve que esquivar un banco de medusas. Y en el kilómetro 8,5 me topé con el muro mental. Ese punto en el que sabes que lo tienes al alcance, pero tu cuerpo grita que no puede más. Quedaban 1500 metros. Con corriente en contra.”

Y, entonces, pensó en todas las personas que la apoyaban y estarían esperándola en la meta. Pensó en todo lo que había conseguido. Había nadado más de 3 horas, había vencido al miedo y había cruzado una línea simbólica que ya no tenía vuelta atrás. Gloria no solo completó una travesía. Se transformó personalmente al vencer sus miedos.

¿El siguiente paso?

Volver a nadar la Vuelta al Hacho y mejorar su tiempo.

Su consejo:

“Enfréntate a tu miedo. Entrena sin excusas y ve a por ello.
Mucha gente tiene un miedo irracional al mar, como yo. Pero no saben lo que se están perdiendo. Está lleno de vida. Es hermoso."